Nosotros No descuente Nuestra experiencia
La comunidad de Arbrea Labs adopta una postura clara: la estética médica no es un producto a la venta. Es un acto médico basado en la confianza, la seguridad y la experiencia profesional. Esta página reúne las voces de médicos de nuestra comunidad global que eligen el valor por encima de los descuentos y dicen públicamente: “Mi trabajo no está en venta”.”
El Black Friday puede funcionar en el comercio minorista. Pero en medicina estética y cirugía plástica, los descuentos agresivos pueden enviar el mensaje equivocado:
- que los procedimientos médicos son mercancías,
- que el “mejor” médico es simplemente el “más barato”.”
- que las decisiones complejas y profundamente personales pueden tratarse como compras impulsivas.
En Arbrea Labs, creemos:
- Los pacientes deben elegir a su médico basándose en confianza, competencia y seguridad, no ofertas de temporada.
- El precio debería nunca eclipsar la calidad de la atención, el tiempo invertido y la responsabilidad asumida.
- Como industria, tenemos el deber de proteger el valor percibido de la pericia médica y la integridad de nuestra profesión.
Esta campaña existe para apoyar a todos los médicos que deciden decir: “Yo no hago el Viernes Negro”.”

Son voces reales y sin filtros de nuestra comunidad. Diferentes países, diferentes especialidades, un mensaje común: “La experiencia no está en venta”.”
Cómo empezó el “No Black Friday
La primera declaración
De la declaración a la conversación
Una campaña permanente
Un movimiento creado por médicos para pacientes
No se trata de una campaña de marketing clásica.
Se trata de una declaración colectiva de cirujanos, médicos estéticos y clínicas de todo el mundo que deciden no participar en la dinámica de los descuentos.
Cada año, invitamos a nuestra comunidad a compartir vídeos breves y auténticos en los que expliquen por qué no realizan promociones del Black Friday en sus servicios médicos o quirúrgicos.
Los riesgos ocultos de la cultura del descuento en la estética médica
Cuando enmarcamos la medicina estética como un “trato”, nos arriesgamos:
Distorsionar las expectativas de los pacientes
Los pacientes pueden centrarse más en la precio que sobre si un tratamiento es adecuado, seguro o necesario.Socavar el valor profesional
Los años de estudio, experiencia y responsabilidad que hay detrás de un procedimiento corren el riesgo de quedar reducidos a un signo porcentual.Fomentar las decisiones impulsivas
Las promociones de duración limitada pueden empujar a los pacientes a reservar tratamientos que no han considerado en su totalidad.Una carrera a la baja
Cuando las clínicas compiten principalmente en precio, todo el sector corre el riesgo de ser visto como una mercancía y no como una práctica médica.
Esta campaña es un firme recordatorio:
La medicina estética es una decisión médica, no una decisión de compra.

¿Es usted médico? Únase al movimiento “No al Black Friday
opta por no descontar sus servicios médicos para el Viernes Negro,
nos encantaría contar con tu voz.









